Para esta temporada primaveral, nada como unos raspados. Foto: Archivo

Jugos cítricos, hierbas aromáticas y hasta hojuelas de chile ayudan a dar un toque diferente a sus azucaradas mezclas

Carlos Borboa

 

 

Ciudad de México (27 marzo 2012).- Típicos de las ciudades calurosas del País, los raspados son golosinas frías que se elaboran con hielo finamente triturado, que se coloca en un vaso y se baña con jarabe de diferentes sabores.

 

Tamarindo, guayaba, fresa, sandía y hasta combinaciones picantes se cuentan entre las variedades más populares. Sin embargo, muchas veces resulta imposible garantizar la higiene del hielo con que se elaboran los tradicionales raspados de carrito, por lo que su preparación casera resulta una excelente alternativa.

 

Para preparar estas heladas golosinas lo primero es preparar un jarabe, cociendo azúcar refinada con agua y pulpa o jugo de frutas hasta obtener una consistencia melosa. Aunque el dulzor depende completamente del gusto del consumidor, la sugerencia es siempre emplear un promedio de 200 gramos de azúcar por cada 4 tazas de líquido.

 

Especias, jugos cítricos, hierbas aromáticas y hasta hojuelas de chile ayudan a dar un toque diferente a sus azucaradas mezclas.

 

Ya listo el jarabe sólo basta con triturar cubos de hielo -siempre elaborados con agua purificada- en una licuadora casera y servir inmediatamente.

 

Combinaciones perfectas
Conozca algunas mezclas que no fallan a la hora de servir sus raspados caseros:

 

- Prepare un jarabe con pulpa de maracuyá y gotas de limón. Sírvalo con chile piquín en polvo
- Elabore un jarabe con melón chino y miel de abeja. Acompáñelo con hojas picadas de menta fresca
- Haga un jarabe de sandía con frambuesas, zarzamoras y fresas. Sírvalo con moras azules enteras
- Prepare un jarabe de concentrado de tamarindo y jugo de mandarina. Disfrútelo con hojuelas de chile o chamoy