El invierno también es temporada de ciertos vegetales, incluso de algunos pocos conocidos por la mayoría, que bien valdrá la pena aprovechar para incorporar nutrientes y salud a nuestro cuerpo. Veamos algunas de estas verduras típicas de estación de frío que podremos encontrar en los mercados.

La chirivía -también conocida como Pastinaca- es una raíz que se utiliza como hortaliza que suele ser una gran olvidada: sin embargo, es un excelente sustituto a la patata tradicional y rica en nutrientes: en especial,del complejo B, como la B1 y ácido fólico y hierro. Su contenido energético es bajo: sólo unas 55 calorías por 100 gramos de producto.

Los limones Meyer son originarios de China, y se cree son una cruza entre el limón y la mandarina o naranja dulce. Su sabor es particular: más parecido a una naranja, de fragancia única e ideal para incorporar en cócteles.

Los nabos son otra de las hortalizas que se adaptan muy bien a los climas fríos, aportan potasio y fósforo, entre los minerales, y vitamina C. Son muy versátiles y tienen un suave sabor dulzón.

Endivia o Escarola Belga: se trata de otra opción de hoja verde sabrosa e ideal para preparar nutritivas ensaladas crudas. Destaca su aporte de vitamina C, hierro y calcio.

La coliflor es otra alternativa que se puede consumir muy bien en esta época fría del año: con una larga historia en Europa -se sabe se ha consumido desde unos 6 siglos antes de la era Cristiana- puede ser incorporada en una gran variedad de formas, en guisos, ensaladas, en salsas y preparados, etc.

Entre sus nutrientes destaca la vitamina C, el fósforo, calcio y hierro, por lo que será una verdura muy bienvenida a la hora de idear un plan alimentario rico y equilibrado. De igual modo, podrás sumar coles, brócoli, repollos, etc.