Hacer de la gastronomía un arte infalible para triunfar en el día de San Valentín, en eso se afanarán estos días cocineros, profesionales o aficionados para que nada falle y cupido vea que, en la Tierra, cuenta con toda la ayuda necesaria para que sus flechas no pierdan el rumbo.
"La gastronomía afrodisíaca tiene una gran parte de sugestión. Es importante crear un clima que acompañe con una persona que te guste", afirma el cocinero Víctor Enrich, especializado en este tipo de gastronomía.
Pero, además de la sugestión, hay una parte, no menos importante, que son los alimentos que se consumen para ayudar a alcanzar el clímax. Por eso, tal y como afirma el chef, ‘el diseño del menú es importante, por su forma, por su diseño y su composición’, dijo Víctor.
Y es que, si el alimento es combustible para la vida, para el autor del libro ‘Cocina Afrodisíaca para Dioses y Diosas’, Guillermo Ferrara, también es ‘placer’ porque la sexualidad aumentará cuando se acompaña de comida.
Independientemente de lo que se vaya a comer o cenar en San Valentín, de nada vale excederse.
Si la trufa es afrodisíaca, comerse un kilo no hará que la pareja caiga rendida al segundo, ‘es como tomarse un bote de pastillas’, aclara Rosa María Pérez Santander, psicóloga especialista en estrés e inteligencia emocional, nutríterapeuta y sexóloga.
‘La historia no está tanto en comer una gran cantidad de alimentos: el placer está en mezclar los alimentos con otras cosas, hierbas, especias; es igual que al amor: si le añades caricias, lo enriqueces’ dijo la sexóloga.
Y la explicación de no comer copiosamente es una cuestión fisiológica, ya que cuanto más comes, el estómago le pide más oxígeno al cerebro y es entonces cuando aparece el sueño, uno de los grandes enemigos de la sensualidad.
Para el cocinero Víctor Enrich, el menú afrodisíaco es importante, tanto por su forma, como por su diseño y su composición. Por estos motivos, debe ir in crescendo, pero siempre tienen que ser menús ‘muy limpios y sinceros’, cuyo objetivo sea hacer disfrutar y despertar los sentidos.
Menús que el chef comienza con una copita de alcohol, siempre en pocas cantidades, algún plato en el que esté presente el marisco y, muy importante, finalizar con algún dulce mezclado con una fruta, sobre todo una fresa porque es muy sugerente.
Si se puede terminar con un postre en el que las manos sean los cubiertos, Enrich apuesta por esto, a causa de la sensualidad que se generará entre los enamorados.
La historia ha dejado escritas mil páginas de amor, pero, sin duda, el amante más célebre fue Giacomo Girolamo Casanova, quien no sólo disfrutaba con la conquista, sino que hacía de casamentera para muchas de sus agradecidas amantes. `Casanova se hacía unas tortillas increíbles con muchos ingredientes para recuperarse rápido de toda la noche amatoria´, cuenta Rosa Pérez.
Y de Madame de Pompadour, amante, amiga y consejera de Luis XV, también se conoce que era frígida, y el rey, gran amante de la gastronomía, mandó hacer una cocina privada en Versalles donde le cocinó muchos platos con trufa con el fin de conseguir una noche de pasión con su amada. De nada sirvió, y Madame Pompadour al final optó por buscar jóvenes amantes para su rey y así no tener que rendir cuentas en la cama.
Otro ejemplo de personaje histórico que dio importancia a la cocina fue Catalina de Médicis, la italiana que llegó a la corte de Francia en el siglo XV y aportó la alcachofa a la gastronomía francesa. Esta planta tiene un gran poder afrodisiaco debido a su alto porcentaje de sulfuro, que hace que se produzca una vasodilatación, y ésta a su vez provoca cierta excitación.
El chocolate, más allá de ayudar a amar, ejerce el efecto contrario. Según la psicóloga Rosa Pérez, `te calma, tiene drogamina, y es sustitutivo; por eso, en algunos países se lo regalaban a las solteronas´.
El plátano, otro de los grandes protagonistas de las cenas del Día de los Enamorados por su insinuante forma, también debido a su alto contenido en potasio hace que el cuerpo se relaje. Pero esto, según Enrich, también tiene una lectura positiva al `evitar que te den calambres si llevas muchas noches haciendo el amor´.
Picantes y especias se sitúan entre los primeros puestos con poderes afrodisíacos. Tal es así que la cocina India es una de las más adecuadas para esta noche, y ya en el Kamasutra se recoge la importancia de la gastronomía en las artes amatorias.
El escritor Guillermo Ferrara aconseja el pescado, el apio y las nueces para los hombres porque `les da mucho poder sexual´.
Las mujeres para Ferrara tendrían que apostar por los mariscos, el salmón, las setas o el sushi: `Casi todas se derriten con estos alimentos´
Las diferentes culturas y civilizaciones que han poblado y alimentado la tierra han dejado su granito de arena en materia de gastronomía afrodisíaca.
Pese a que la cultura india es la más afamada, todas aquellas que han tenido en cuenta las especias y las hierbas tienen un gran potencial erótico en su cultura culinaria.
Por ejemplo, `la cultura china, que no tiene nada que ver con lo que conocemos, usa mucho el jengibre y éste prolonga la vitalidad del hombre así como su longevidad´, relata la s
En cuanto a etapas históricas, fue la Edad Media la peor época para la gastronomía afrodisíaca y se llegó a prohibir el cultivo del apio por la forma propia del producto que recordaba la del aparato sexual masculino.